sábado, 28 de diciembre de 2013

El Hobbit: la desolación de Smaug


El Hobbit: la desolación de Smaug (The Hobbit: the desolation of Smaug)
(2013)

Director: Peter Jackson
Guión   : Fran Walsh, Philippa Boyens, Peter Jackson, Guillermo del Toro

Martin Freeman
Ian McKellen
Richard Armitage
Evangeline Lilly
Benedict Cumberbatch
Orlando Bloom
Luke Evans





Bilbo y los enanos continúan su peligroso viaje hacia la guarida del dragón Smaug…

 Bilbo Bolsón y su cuadrilla de enanos en pos de enfrentarse a un dragón han vuelto. El Hobbit: la desolación de Smaug, es la segunda parte de la trilogía que compone la adaptación cinematográfica de El hobbit, escrito por J.R.R Tolkien. Esta vez la aventura continúa allí donde lo dejó la anterior: los enanos, capitaneados por Thorin Escudo de roble más un hobbit que hace de saqueador, siguen a lo suyo, es decir, el camino hasta la guarida del dragón Smaug para encontrar una gema que les permita cumplir una profecía que les asegura su regreso a la gloria.
Muy bien, a favor puedo decir que…
La peli sigue exactamente la misma línea de la anterior, y esta se destacó por dos cosas: espectacularidad y aventura. En esta ocasión debo decir que ambas se ven aún más ampliadas porque, como puedes suponer, las andanzas de los protas son más variadas y, por ende, si cabe, más emocionantes que las que vimos en la primera peli.
Para empezar, me gusta la escena con la que arranca, es decir, Gandalf encontrándose por primera vez con Thorin en la taberna de Bree y convenciéndole para que se meta en la aventura en que se mete. Der este modo se consiguen dos cosas: si has visto la otra peli, te refresca un poco y te mete en situación en dos minutos. Si no la has visto, es un modo perfecto de resumirte todo el cotarro y de que te adentres en la odisea de los enanos. Además, me parece perfecto que dicho encuentro sea en Bree ya que, si has visto o leído El Señor de los Anillos, ahí, años después, van a suceder una serie de cosas muy importantes en la saga. Y, sí, ese tipo que cruza la pantalla es Peter Jackson en plan Alfred Hitchcock. A partir de aquí, como he dicho antes, lo único que tienes que hacer es repantigarte en la butaca del cine, tener bien a mano las chuches o las palomitas y, literalmente, dejarte llevar. No más, pero no menos.
Sigo. Me ha gustado mucho la inclusión, aunque cortita, de un personaje cuya ausencia ya mencioné en la reseña de la anterior entrega y que ha sido un alivio verle esta vez: Beorn, el tipo que, a veces es un hombre y, otras, un oso. Gigantesco, pero oso. Y, sobre todo, espectacular. Esperaba que la cosa se detuviera más con él pero se ve que han preferido detenerse en otros aspectos de la historia.

Otro de los momentos que esperaba con cierta impaciencia era lo que sucede durante la travesía a lo largo del Bosque Negro. Si lees el libro, dichos acontecimientos son el paradigma de las típicas aventuras que hemos visto o leído hasta la saciedad y que suceden en un bosque tenebroso: confusión, pérdida, sensación de miedo y muchas cosas parecidas, además de los monstruos típicos que, cómo no, suelen acechar por esas oscuridades. Los momentos en el mencionado bosque son tremendos. Toda la escena de las arañas es increíble; los insectos se muestran rápidos, asquerosos, letales y, sobre todo, parlanchines, algo que siempre me ha gustado del libro: la capacidad de hablar de ciertos animales. Luego tenemos las aventuras que suceden con los elfos y que sirven para la inclusión de dos personajes que no están en la novela original: Legolas y Tauriel. Todo ello, claro está, con las vistas puestas en el objetivo primordial de los enanos: conseguir regresar a su hogar. Pero si destaco algo de estos momentos es, sin duda, la aventura con los toneles. En el libro es uno de mis episodios favoritos y debo decir que, aquí, lo han tratado con la mayor acción y el dinamismo posibles, incluyendo el hecho de los orcos liderados por Azog fastidiando a los pobres enanos.
Paso a Esgaroth, donde, por fin, podemos contemplar en todo su esplendor la ciudad sobre el Lago Largo. Debo decir que me ha chocado un poquito el aspecto que le han dado, una especie de puerto pesquero algo desaliñado y tan frío como la nieve que no deja de caer. Conste que esto no lo digo como algo malo; todo lo contrario. Lo que sucede es que servidor se había imaginado desde siempre el lugar un poco más idílico y aquí se han esmerado en presentarlo como un lugar muy realista.
Pero, si hay algo que tengo que destacar de todo el metraje, lo cual puede llegar a ser una labor muy difícil, es, sin duda, todos los momentos en los que aparece Smaug. Vamos por partes. El lugar donde vive el animalito, es decir, el interior de la montaña, rodeado de riquezas de todo tipo y oscuridad se mire por donde se mire, me ha parecido sublime. Luego, tenemos al propio Smaug. Aunque suene tópico, solo puedo utilizar una palabra: impresionante. Para mí, sin duda, el mejor dragón que ha pululado jamás por la pantalla de un cine. Es espectacular, siniestro, muy expresivo y, sobre todo, ágil y dinámico. Por suerte, han conservado su habilidad para hablar (me remito a lo que he comentado antes) y le han dotado de una personalidad tan poderosa como su aspecto, resultando soberbio, arrogante y amenazador. Además, el aspecto físico en sí, con esos dientes tan afilados, las alas enormes y ese cuello tan largo y flexible, ha resultado, al menos para este que escribe, un gran acierto. Lo único que puedo pedir es que, por favor, en la siguiente entrega le muestren en toda su gloria destructiva (aquí hace de las suyas pero de otro modo más “calmado”) Por desgracia, la peli termina cuando el amigo reptiliano sale volando con la sana intención de matar a cuantos pueda. Es lo que tiene vivir al lado de un dragón.
 
Continúo. Las localizaciones que podemos ver a lo largo de todo el metraje siguen la estela de lo que pudimos ver en su momento en El Señor de los Anillos y en la primera peli de El Hobbit: espectaculares. La mezcla entre paisajes naturales y decorados artificiales es tan perfecta que, de veras, te crees a pies juntillas que, durante más de dos horas, estás en la Tierra Media. Si me tuviese que quedar con alguna, a parte de la guarida de Smaug, quizá elegiría los parajes élficos del rey Thranduil. Y es que siempre he pensado que, en cuestión de elfos, Jackson y su equipo se han lucido siempre.
Y, si de lucimiento hablamos, ¿qué se puede decir de los efectos especiales? Calificarlos de impresionantes o espectaculares creo que es quedarse corto. Todo aquí rezuma ordenador, ya sea para mostrar seres espeluznantes o para dar un empujoncito a ciertas coreografías que son el toque perfecto para peleas imposibles. Las arañas, los orcos, los wargos, lo poquito que sale Beorn y, sobre todo, todo lo referido a Smaug te va a dejar clavado en la silla. ¿Hay más cosas? Por supuesto; ahí tenemos la aparición de cierto nigromante que, en el futuro, va a hacer la puñeta a lo largo y ancho de toda la Tierra Media. Yo te puedo decir esto o lo otro acerca de los efectos pero, de veras, es algo que merece verse con los propios ojos.
Y ahora paso a los actores. Como ya sucedió en la otra entrega, todos ellos están metidos hasta las cejas y orejas (puntiagudas o no) en sus respectivos papeles.  Martin Freeman sigue espléndido como Bilbo. Richard Armitage se sigue luciendo lo suyo como Thorin, mostrándose valeroso y, a la vez, amargado. Ian McKellen, que es un actor por el que siento una predilección especial, será el mejor Gandalf que jamás haya conocido el cine.  Destacar la labor del resto de los enanos me parce extenderse demasiado pero, todos ellos, unos en mayor medida que otros, se ajustan muy bien a sus papeles.  Debo hacer mención especial a dos que pueden sorprender a más de uno, más que nada, porque no salen en la novela: Orlando Bloom repite como Legolas y Evangeline Lilly hace de Tauriel demostrando que, en la Tierra media, hay más elfas aparte de Galadriel y Arwen. Luke Evans como Bardo es el que más sosainas me parece pero ahí queda.
 
¿Cosas que me han dejado así, así?
Este tema puede resultar más peliagudo de lo que parece y ya, con la anterior entrega, la cosa trajo miga. Vamos a ver, si hubo algo por lo que destacó la anterior peli, y que ya en su momento hizo correr ríos de tinta y largas entradas en blogs variados, fue el hecho de que, partiendo de la base del libro (lógico) se metieron cambios para parar un tren, bien en situaciones (Radagast) o en personajes (Azog, Sauron) Aquí no han cambiado de parecer y han seguido en su línea. Lo dije cuando hablé de su predecesora y lo digo en este caso: si haces tres películas de unas tres horas basadas todas ellas en un libro de unas trescientas páginas, tienes que meter mucha paja. Y aquí la han metido. Que guste o no depende de lo abierta que tengas la mente y de cómo sean tus miras. Está claro que la peli dura tanto porque han añadido muchas escenas y otras las han estirado a más no poder (léase el tema de las peleas) Esto no lo considero como algo malo pero, de nuevo, creo que se ha perseguido dar un aire demasiado épico a una historia que tira más bien a cuento infantil que a otra cosa. La inclusión, de nuevo, del personaje de Radagast y cómo acompaña a Gandalf para averiguar qué pasa con ese extraño Nigromante a mí no me molestan pero dejan cierto regusto a que están ahí para ampliar metraje y que, de no ser incluidas, tampoco se las hubiera extrañado demasiado. Todo esto, por supuesto, no deja de ser mi opinión y, para gusto, los colores.
El incluir el personaje de Legolas y su compi Tauriel es, quizás, lo que más frío me ha dejado. Creo que el primero, en esta parte, no pinta nada, salvo, quizás, la oportunidad de utilizar como reclamo a Orlando Bloom (que, dicho sea de paso, y un poco en plan cotilla, le veo muy raro; quizás, más mayor y más gordete de cara. ¿Se advierte retoque digital? Mero comentario. Lo que está claro es que, quizás, lo elfos no envejecen pero los humanos sí y Bloom pertenece al último grupo) En lo que respecta a ella, se podría decir tres cuartos de lo mismo. ¿Quedan mal? Repito: no. ¿Están por estar? Me da que sí. Y eso de que haya cierta atracción sexual entre un enano y una elfa me queda demasiado forzado, por no decir que me parece una tontería del tamaño Smaug. Además, debo decir que la imagen de los elfos que se da aquí me ha roto un poquito la que tenía después de ver el Señor de los Anillos ya que se les ve muy belicosos, buscando pelea siempre y ciertamente picajosos (de nuevo, me remito a Legolas, cuya cara, a veces, da más miedo que cualquier orco)
 
Paso a otra cosita. Si bien, como es lógico, esta entrega lleva por nombre El Hobbit y, sin duda, su prota es Bilbo, me ha dado la impresión de que el papel de este, hasta el final, queda relegado a un segundo término, como si el pobrecito Bilbo solo sirviera para salvar a los enanos de situaciones peligrosas y, después, pasase a segundo plano. En esta entrega, creo que el protagonismo se dirige más hacia Thorin y sus motivaciones, incluso hacia Bardo, antes que hacia el hobbit. Lo digo de nuevo: es, a fin de cuentas, una mera impresión.

Pues esto ha sido todo. ¿Recomiendo verla? Vamos; ni lo dudes. Es puro entretenimiento y el tiempo se te va a pasar volando. La aventura en su estado más puro está servida y creo que no hay un momento a lo largo de todo el metraje en el que no ocurra algo. ¿Da la sensación de estar hinchada? Sí, claro, lo mismo que la anterior y me sigue dando esa impresión de alejarse del cuento encantador que es el  libro para meterse en terrenos más épicos. ¿Esto molesta? A mí no. Todo depende, como dije antes, de lo abierto de miras que seas a la hora de sentarte en la butaca. Si vas dispuesto a dejarte llevar de la mano de una aventura de la buena, tienes el buen rato asegurado. Si, en cambio, te pones en plan tiquismiquis puede que empieces a sacar tantos “peros” como quieras. Yo, desde luego, prefiero la primera opción.
Solo me queda una duda: si esta peli termina cuando Smaug va a la ciudad, ¿van a pasarse tres largas horas mostrando una batalla? No creo que esto sea así. Quizás, se dediquen también a enlazar el fin de esta historia con el comienzo de la siguiente trilogía. Esto, claro está, no deja de ser una frikada mía y, lo mismo, nos sorprenden con lo que les venga en gana.
Hasta aquí he llegado. Lo digo de nuevo: si puedes, dale una oportunidad; no lo lamentarás.
Vigilad el cielo.
 

13 comentarios:

  1. ¡Hola, Israel!

    Vi la peli el otro día y la verdad es que me gustó mucho porque fue muy entretenida y se me pasó el tiempo volando. Es verdad que hay que rellenar escenas para hacerl una trilogia de un libro tan pequeño y esto a la gente le puede molestar. Sobre todo a los más puristas. Yo en cambio intento no obsesionarme con eso. Es verdad que en algunas historias me molesta que se haga esto (por ejemplo en la última versión cinematográfica de "El retrato de Dorian Gray") pero en el caso de la segunda parte del Hobbit no ha sido así. También reconozco que tengo debilidad por Freeman y Armitage y están muy bien en sus papeles :) Y sí, es verdad, Orlando Bloom está un ""pelín" cambiado. Los años pasan para todos ;) Muy buena crítica!!

    ¡Nos leemos!

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  2. ¡Hola, Laura!

    Pues sí, cambios hay y otras cosas más se han añadido pero, en conjunto, como digo en la reseña, es el colmo del entretenimiento y, sin duda, una peli que hay que ver. Y Samug... ¡Pero qué bien lo han hecho! La verdad es que espero con ganas la tercera. ¡Todo un año! (snifs...)

    ¡Nos leemos!

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  3. ¡Hola! me ha encantado tu blog y me he unido a él!
    El otro día ví esta película que esperaba con muchas ansias y bueno, la verdad es que visualmente es espectacular (como era de esperar) y muy trepidante y entretenida. Podemos ponernos puristas a la hora de todas la invenciones y rellenos que hay con respecto a lo que es el libro, pero bueno... quizá una trilogía es demasiado para un libro como "El Hobbit" y quizá una trilogía se queda en poco para un libro como "El Señor de los Anillos". De cualquier forma, ya estoy esperando la tercera parte con muchas ganas!!
    Te invito a visitar y unirte a mi blog de fantasía, leyendas y ciencia ficción:

    http://donde-los-valientes-viven-eternamente.blogspot.com.es/

    Saludos y Feliz Año!!

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    1. ¡Hola Hammer!

      Pues sí, por unas o por otras, una peli muy entretenida de ver.

      ¡Nos leemos!

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  4. hola israel ayer la vi la peli y es total me encanta este tipo de pelis por que quien dice no que exista algo asi en algun lugar ! excelente post !

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  5. Me ha gustado mucho tu review; mucho mejor que la mía -echa con prisas para poder publicarla antes de fin de año -.

    A mi la película me ha encantado. La primera me gustó mucho y esta me ha gustado mucho mas. A mi no me ha disgustado mucho el material de relleno, ya que Peter Jackson lo ha hecho todo muy bien y con mucho talento; de hecho, esta entrega la sensación de estiramiento de la historia es menor; o, al menos, esa es la impresión que me ha dado. Y coincido en lo que dices de la escena de Smaug, para mi el mejor momento de la película y la mejor escena del año.

    A mi si me ha gustado el personaje de Tauriel; claro, que esto podría deberse a lo mucho que me gustan las chicas guerreras. En cuanto a la relación con el enano a mi si me ha gustado y, además, ha sido una sorpresa de lo mas agradable, porque en el trailer parecía que nos iban a meter una historia de amor parecida a la de Aragorn y Arwen entre ella y Legolas y eso a mi me echaba para atrás; pero, bueno, esto es solo mi opinión personal.

    En resumen. Muy buena crítica, me ha gustado mucho.

    Saludos y Feliz Año Nuevo.

    TRAFFIC CLUB

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    1. Muchas gracias, Axa.

      La verdad es que espero con ganas la tercera parte. Creo que puedo decir que esta segunda me ha gustado aún más que la primera. Es muy épica, no da tregua y, sobre todo, Smaug es tremendo. Y, desde luego, coincidimos en lo de las chicas guerreras...

      ¡Nos leemos!

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  6. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  7. La película ha esta muy buena, más acción que la anterio, como dices un bueno incio que nos atrapa con Gandalf en la caverna reclutando al heredero del tesoro de los enanos.

    El hombre oso es un personaje que me fascina y es grato verlo en esta película, ha estado también muy bien la pelea de los barriles y espectacular el dragon al final.

    Solamente tengo 2 quejas, la primera es que me molesto un poco la inclusion de la elfa y la historia de amor alo mejor porque me gustan las chicas de pelo negro jaja y si ella hubiera tenido ese tipo de pelo no me habría molestado.

    Y dos...yo esperaba que ya la pelearan con el dragon y lo vencieran en esta, al cabo en la otra podrian perfectamente tener la otra batalla epica, pero bueno la cosa no ha salido como yo esperado y tendre que esperar hasta la tercera película. Le doy 9 / 10.

    Y ps a esperar un año para la proxima.

    Por cierto perdón si he estado ausente, pero ya estoy de vuelta y me veras reglularmete por aquí. tu blog me gusta no vengo solo porque seal de traffic club.

    . Te invito a pasar a leer mi reseña de Fables en cualquiera de mis blogs. esto porque es mi comic favorito de la linea Vertigo, una linea para adultos de la Dc Comics..

    tRAFFic club.

    Blog de warrior.

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  8. ¡Hola, Warriror!

    La verdad es que lo de la historia de amor entre la elfa y el enano me dejó un poco sorprendido pero, bueno, tampoco es que moleste en un contexto en le que se han cambiado tantas cosas.
    Con respecto a la pelea con Smaug, como ya digo en la reseña, está claro que la dejan la para la tercer (increíble que un libro tan cortito de para tanto) pero me da que veremos algo más que batallas; ¡no creo que machaquen al espectador con tres horas de vuelos y fogonazos! Será cuestión de esperar y ver...

    ¡Nos leemos!

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  9. Estoy de acuerdo en bastantes cosas de tu crítica. En general, la película me gustó. La escena del descenso del río en barriles es buenísima, como todo la parte del dragón Smaug, y me agrada la inclusión de Evangeline Lily como Tauriel. Pero es cierto lo que dices que si en la primera hicieron cambios respecto a la novela en ésta se ha hecho de forma exagerada. Un saludo.

    Traffic Club. Club de Cinéfilos.

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  10. Muy buenas, Daniel.

    Teniendo en cuenta que, en teoría, "solo" queda la batalla final, imagina lo que aún se pueden inventar para rellenar tres horas más de peli. No es que esto me moleste pero es lo que más me descoloca de esta trilogía. En fin, supongo que es cuestión de esperar...

    Gracias y saludos.

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