Vamos allá con uno de los giallos más conocidos del maestro del terror Dario Argento.
Para empezar, tengo que destacar el argumento que, de simple que es, da opción a muchas y muy variadas posibilidades: un escritor, Peter Neal, es acosado por lo que parece que es un admirador perturbado que se dedica a matar gente tomando como ejemplo el último libro de Neal, Tinieblas (Tenebrae en original) A partir de aquí, el guión tiene vía libre no solo para mostrarnos la típica historia de asesinatos. De hecho, puede decirse que esto es la parte más superficial de la peli. Lo que tenemos por delante es cómo el susodicho guión se las apaña para jugar literalmente con el espectador de forma que te hagas pensar en todo momento quién demonios puede ser el asesino. Por eso, a lo largo de todo el metraje somos testigos de constantes giros de guión que van a hacer que te enganchas sin problemas a la cinta y tú mismo te cuestiones quién es el responsable de lo que estás viendo.
Dicho así, puede parecer que estamos ante una historia más o menos convencional de crímenes con su toque de misterio pero la cosa va más allá cuando, en mitad de la narración, la película nos regala ciertas escenas de cierta chica con zapatos rojos que parece que no tienen pies ni cabeza pero que resultan ser muy importantes. Esto hace que al ya mencionado toque de misterio se le añada cierto matiz absurdo (en un principio) que luego une todo. Por eso, estas Tinieblas se ven tan bien, porque entretienen y captan a partes iguales.
Pero esta es una película de Dario Argento y el tipo era en su terreno un maestro. Por eso aquí hay emoción, muertes, sangre y, además, se ve todo. Acompañadas de una afilada navaja de afeitar, de un cuchillo bien puntiagudo o de un hacha que siempre está a mano, las muertes aquí se reparten como un festín sangriento para ser degustado con calma. Me quedo, sin duda, con la de la chica que vive con su compañera y que es pasada por la cuchilla mientras la otra está escuchando música. Me encanta cómo la cuchilla rasga la sábana y deja ver la cara de la actriz que, por cierto, se ha utilizado como portada de la peli en ciertos sitios. Y, sí, amigos, aquí la sangre es roja brillante; tanto que hasta da gusto verla (esto hace que suene como un psicópata pero me da igual) y las chicas están o bien desnudas o están en proceso. Y son todas guapísimas.
Y, como no podía ser de otra forma con un giallo, una historia de estas características se la juega en el final. O finales. Y, sin duda, aquí rematan de manera soberbia.
Y ahora, ¿hay algo que me haya chirriado un poco? beuno, solo puedo decir una cosita que no es que lo vea como fallo (ni de broma) pero creo que resulta pelín forzado. Estoy seguro de que, cuando veas esta peli, vas a recordar a la pobre asistente de quince años huyendo del perro. Bueno pues, después del momento animalito (léase doberman, más típico imposible para la época pero viene de perlas), me parece, como dije, muy forzado que la pobre cría se refugie PRECISAMENTE en ESA casa. Pero, bueno, todo sea por los hachazos.
En resumen, una película de diez de principio a fin. Entretiene, emociona y sorprende a partes iguales, aspectos que, al menos para mí, la hacen ya más que recomendable. Y, sí, es de 1982 (en Imdb. En Prime dice 1984) Ha llovido mucho y hay cosas típicas de la época que cantan pero, además, eso le da un toque encantador que suma muchos puntos.
Disfrutad.
PD: Giallo: En el contexto cinematográfico, para el público italiano giallo ha venido a referirse a cualquier tipo de misterio de asesinato o de suspenso, independientemente de su origen.