(2012)
Director: Rupert Sanders
Guión : Evan
Daugherty, John Lee Hancock, Hossein Amini
Kristen Stewart
Chris Hemsworth
Charlize Theron
Sam Clafin
Ian McShane
Bob Hoskins
Y
vamos a allá con la segunda aproximación que este año se hace al mito y
personaje de Blancanieves. La anterior fue la descafeinada, acaramelada y
dulzona Blancanieves (Mirror, mirror)
No sé si por casualidad o porque la competencia en Hollywood es más salvaje que
nunca pero, ya desde hace meses, se dijo que iban a ser lanzadas dos versiones
del personaje. Pues bien, después ver lucir palmito a Julia Roberts y Lily
Collins en la otra película, nos llega esta nueva (y renovada) Blancanieves con
cazador incluido que viene a mostrar una imagen por completo distinta y
guerrera del personaje.
Como
ya dije en la Blancanieves de Collins, si alguien espera ver una versión más o
menos moderna de la joven y bella princesita que viene a nuestra memoria en
forma de personaje animado, quizás esta versión le sorprenda. Y es que esta
nueva princesa se va a caracterizar por una cosa: es épica, guerrera,
aventurera y nada ñoña. No obstante, para sorpresa de este que escribe, a pesar
del modo épico en que está narrada la historia, se las han apañado para
conservar ciertos detalles en relación con Blancanieves que todos conocemos.
Veamos…
A
favor debo destacar varias cosas. Para empezar, la cinta arranca con la
historia de Blancanieves cuando era pequeña. Así, conocemos de dónde le viene
el nombre, a sus padres y cómo la desgracia se centra en la madre. No obstante,
esto es sólo un modo de empezar porque, de manera bastante realista (siendo el
realismo una constante más que evidente en la cinta rodeado, claro está, de ese
carácter fantástico), asistimos al encuentro de Rawena y cómo, mediante un
ejército fantasma, consigue introducirse en el castillo, enamorar al padre de
Blancanieves y, por supuesto, casarse con él.
A
partir de aquí, la historia es la que todo el mundo conoce. Hay un espejo
mágico que me ha gustado mucho, con ese personaje que surge de él pero cuyo
rostro nunca vemos, una reina mala con ganas, un cazador, enanitos y mucha,
mucha aventura.
Como
dije antes, el factor fantasía es muy importante en esta película. Los
responsables han sabido mezclar, de manera bastante ingeniosa para mí, un
cuento clásico donde los haya con el carácter fantástico más épico, muy en la
línea de películas como la saga de El
señor de los Anillos o Las Crónicas
de Narnia. Para ello, no han dudado en recurrir a personajes mitológicos
tales como el trol gigantesco que vive en el bosque o las hadas, representadas
aquí de manera muy original y que, bien miradas, tienen cierto aire a
Campanilla solo que más realista.
A
destacar también la ambientación medieval, muy lograda, pero conservando ese
toque de cuento fantástico. Así, los poblados, campamentos y, sobre todo, castillos,
me han parecido muy bien ellos. A esto hay que añadir el vestuario,
impresionante, que se funde de manera muy sutil con esos tonos grises y oscuros
que predominan a lo largo de toda la película. Si nos fijamos, el vestido de
Blancanieves, con sus tonos oscuros, podría ser utilizado por cualquier
campesina o guerrera. El del cazador o lo enanos siguen esta tónica: colores
oscuros, discretos, que se integran en la tonalidad global de la cinta de
manera perfecta. Y, si de vestuarios se habla, cabe destacar los modelos que
luce Charline Zheron como malvada reina: a pesar del realismo que destilan,
tienen ese aire de cuento que les va muy bien y me ha gustado mucho que le
conserven la corona puntiaguda que ya lució el personaje en la película de
animación.
Sigamos,
que aún queda. Hay una cosa que sí me gustaría señalar. Y es que, a pesar de
que esta versión puede parecer por completo fuera de órbita si la comparamos
con la imagen que se tiene con todo lo relacionado con el personaje (a saber: protagonistas
candorosos, entrañables, colorido, bondad por los cuatro costados…) me quito el
sombrero antes ciertos detallitos que han tenido en cuenta con respecto a la
versión animada y que, pasándolos por el filtro realista y épico que antes
comenté, han tenido el valor y el buen hacer de incluir en esta. Me refiero al
memento en que Blancanieves se pierde en el Bosque Oscuro y, asustada, comienza
a correr hacia ninguna parte. Es entonces cuando los árboles, con apariencia
demoníaca, parecen cobrar vida y sus ramas, cual manos fantasmales, tratan de
agarrar a la princesa. También todo lo referido a la manzana que, desde casi la
primera escena, hace acto de presencia y vemos lo que ocurre cuando
Blancanieves la come. No se desvanece así por así sino que la vemos sufrir
hasta que sucede lo que sucede. Por no hablar de una presencia propia del
cuento pero que pasa casi desapercibida, más que nada porque es uno de los motores de la
historia: el personaje de El cazador y que, cómo no, recibe el encargo de traer
el corazón de la protagonista. Como puede verse, detalles que han reciclado
pero que están sacados directamente del cuento original, así que un buen punto
a favor por ello.
Como
es obvio, en una película de esta naturaleza, donde conviven reinas malvadas,
princesas, trols, enanos guerreros o venados enromes, hay que hacer una mención
especial a los efectos especiales. Para mí, muy bien hechos. El trol, por
ejemplo, lo han bordado, dándole esa textura de corteza de árbol y otorgándole
un movimiento muy ágil (al contrario de cómo se les suele representar, esto es,
grandes, torpes y medio idiotas). Las hadas, como ya mencioné antes, muy
logradas, si bien es cierto que se lucen poco. También muy bien los ejércitos
fantasmales o las batallas. Pero, si hay algo que destaca en cuestión de
efectos es, sin duda, todo lo referido a Charline Zheron. Todas y cada una de
las tomas desplegando su poder de bruja (o sufriéndolo, como cuando los años le
caen de golpe) está perfectas. Aquí hay ordenador por todas partes y también,
supongo, maquillaje, pero ambos dan como resultado un despliegue maléfico
perfecto. Me encantó esa toma en la que la malvada reina se sumerge en algo que
parece leche (¿) y luego sale de ahí totalmente cubierta por ese líquido, como
si fuera una estatua de cera. Por no hablar de cómo, cuando le viene en gana,
su cuerpo se funde con miles de cuervos o se despacha a unas cuantas doncellas
para permanecer joven. Ah, y si de efectos se trata, al margen ahora de la
reina, atentos a los enanitos. Bajo ese maquillaje y truco, están actores como McShane
o Hoskins. Impresionante.
Y
si de actores hablamos, vamos a por ello. La primera que destaca, Christen
Sterwart. Me ha parecido una muy buena Blancanieves y ha resultado ser distinta
a lo que pensaba. Me explico: están vendiendo la moto de que en esta película
todo es batalla, guerra y hachas volando, dando a entender que Blancanieves
aquí es una especie de mezcla entre Ripley de Alien y Alice de Resident
Evil . Bueno, si bien está claro que batallas hay, lo cierto es que el
personaje en sí se ha mostrado valiente pero, también, vulnerable. Y creo que
eso es algo que Kristen Stewart ha sabido expresar muy bien. Chris Hemsworth como
El Cazador (que, por cierto, no tiene nombre) da lo que ofrece: un personaje
aventurero, lleno de músculos pero, también, con una historia a sus espaldas
que lo hace creíble. Y, además, recibe que da gusto, así que muy bien también.
Y, cómo no, Charlize Theron en el papel de la malvada reina bruja. Y lo de
malvada no es un decir. Está metida en su papel hasta las cejas y es capaz de
resultar frágil e incluso vulnerable pero también, cuando le cambia el gesto y
abre esos ojos claros como platos, letal. Y eso es lo que es: una bruja letal.
Un gran acierto haber contado con esta actriz y definir un personaje que no
solo luce palmito. El resto del elenco, como Sam Spruel haciendo de hermano (Finn)
o los enanitos Ian McShane o Bob Hoskins (entre otros, claro) respaldan de
manera convincente al trío protagonista.
Como remate final, me gustaría también señalar la banda sonora a cargo de James Newton-Howard. Contiene pasajes muy destacables que van desde momentos muy tensos y épicos (todo lo referido a batallas y situaciones peliagudas) a otros más relajados y románticos. Sin duda, un logro…
¿Cosas
en contra? La verdad, pocas. Lo único que desatacaría es el personaje de
William, que no pinta mucho en la historia y que es utilizado a modo de reclamo
romántico (no mucho, pero ahí queda) pero que en realidad no aporta mucho, ya
que el momento beso no es protagonizado por él (no diré por quién pero, si
sumas dos y dos, las cuentas salen).
En
resumen, amigos, una película destacable que me ha gustado bastante y que, sin
duda, recomiendo ver. Asegura dos horas largas de hacer que te pierdas en un
reino fantástico, que conozcas a los personajes que pululan por allí y que, en
definitiva, pases un buen rato y te olvides de todo. Como siempre digo, no se
le puede pedir más a una película de esta naturaleza. Y, esto lo señalo como
opinión por completo personal, después de lo edulcorado de la versión de Julia
Roberts, ha sido un alivio ver a esta Blancanieves hacer algo más que no sea
poner gestos de dibujo animado ni cantar canciones horteras.
Pues
eso es todo. ¡Vigilad el cielo!
Os
dejo el tráiler:
BLANCANIEVES ES MI PRINCESA FAVORITA!
ResponderEliminarYO CONOZCO ESTAS BLANCANIEVES Y ESTAS MALVADAS MADRASTRAS DE BLANCANIEVES:
ResponderEliminarDISNEY(1937).
JETLAG PRODUCTIONS Y GOODTIMES ENTERTAINMENT(1995).
LILY COLLINS Y JULIA ROBERTS(2012).
KRISTEN STEWART Y CHARLIZE THERON(2012).
TARYN DAVIS,MONICA KEENA Y SIGOURNEY WEAVER(1997).
ELIZABETH MCGOVERN Y VANESSA REDGRAVE(1984).
KRISTIN KREUK Y MIRANDA RICHARDSON(2001).
DIANA RIGG,NICOLA STAPLETON Y SARAH PATTERSON(1987).