sábado, 25 de octubre de 2014

Bates Motel - Temporada 2


Bates Motel - Temporada 2
(Bates Motel - Season 2)



Freddie Highmore.
Vera Farmiga.
Max Thieriot.
Nestor Carbonell.
Michael O'Neill.
Paloma Kwiatkowski.
Michael Eklund.






Norman Bates y su madre continúan viviendo del motel que compraron aunque, para ello, tengan que enfrentarse a muchas dificultades. Además, Norman sufre unos bloqueos cada vez mayores...



Muy buenas a todos.

Hoy vengo con la segunda temporada de Bates Motel, que está recién terminada. Si quieres saber cuáles fueron mis impresiones de la primera temporada, no te cortes a hacer click aquí y, de este modo, te pones en situación.

Por si estás en plan despistado y no sabes qué narices es esto, te comentaré así, en plan rápido, que la serie nos va a contar los orígenes de Norman Bates. Y, ¿quién es el tipo? Pues ese que en Psicosis se pasó media peli vestido de su madre muerta y amargando la ducha a ladronas más o menos monas.




La primera temporada estuvo muy bien; fue una presentación de personajes y situaciones muy acertada y un buen campo de cultivo para que comenzáramos a comprender los orígenes de uno de los mayores criminales de la historia del cine. Muy bien, pues esto es lo que os puedo decir de esta segunda temporada:

Para empezar, esta serie no es una  donde puedas seguir una trama porque, lo mismo que sucedió en la pasa temporada, sí vas a poder seguir varias, todas ellas, enlazadas entre sí. Así, vamos a asistir la narración de tres bloques. Por un lado, tenemos la de la madre de Norman (Norma. Sí, lo del nombre, ni hecho a posta) que está luchando con todas las fuerzas por seguir adelante con el negocio del motel y quiere que la carretera de circunvalación no se haga, ya que rodearía al pueblo y, por eso, perdería clientela. Esto, dicho así, puede parecer algo soso y simple y no te falta razón. Lo que pasa es que la amiga, sin maldad la pobre, no duda en pedir ayuda a mafiosos que son cualquier cosa menos buenas personas. Si a eso le añadimos que tiene que tratar con un hijo que es un mini mafioso y otro que está como una regadera, la cosa se pone más que interesante. La segunda trama es la de Dylan que, por si no lo sabes, es el mini mafioso. Es curioso cómo en un pueblo tan cutrecillo puede haber tanta mafia más o menos controlada (en concreto, dos familias) Este segundo hilo de la historia está muy bien llevado porque se relaciona con el de Norma tarde o temprano y conlleva unas consecuencias muy interesantes. Y, por último, tenemos a Norman. El pobre está hecho una piltrafa mental de proporciones más que considerables y, en esta ocasión, profundizamos mucho más en él y empezamos a ver quién va a ser realmente: un elemento de mucho cuidado que, en realidad, está muy, pero que muy enfermo. Claro hay que entender a la criatura: con una madre así, lo raro sería salir normal.





Todas estas tramas, aunque te las he resumido de manera muy simple, están conectadas entre sí de manera muy natural. Me gusta mucho que no todo se centre en Norman porque, al menos para mí, sería muy muy tentador poner a Norman como eje único de atención mientras que el resto le bailan el agua con más o menos gracia. En todas y cada una de sus variantes, el argumento principal se las apaña pero que muy bien en otorgar mucho protagonismo a cada personaje de forma que la serie en general se ve muy reforzada por una historia firme, muy bien llevada y contada sin ningún tipo de punto flaco por ninguna parte.

Los personajes siguen siendo los mismos que en la anterior ocasión y se han permitido el lujo de hacerlos avanzar y, sobre todo, evolucionar. Si hay algo que me gusta de esta serie es lo bien cuidados que están y cómo se han esforzado en que todos parezcan reales y alejados del arquetipo de personajes perfectos que pululan por muchas series cuyo nombre no quiero ahora recordar Norma, a su modo, está tan hecha trizas como su hijito pequeño; ahí tenemos el hecho de que su hermano la violase y tuviera un hijo con él. Dylan es, a su modo, carne de cañón. Y Norman... Qué te voy a decir de él. En esta segunda temporada vemos retazos mucho más definidos del monstruo en el que se va a convertir gracias a los bloqueos que sufre pero, como dije antes, todo partiendo de la base de que está enfermo a lo que hay que añadir, por supuesto, una madre obsesiva, controladora y que parece más bien su novia. Además, servidor debe destacar que el muchacho haya intentado alejarse de ella con la novieta que se marca, Cody. La novia perfecta que él no debería tener.

Los actores siguen igual de bien que en la temporada pasada. Vera Farmiga es una Norma estupenda. Sigo diciendo que me choca verla tan joven y mona, no como la ancianita que vimos en Psicosis (Con respecto a esto, atentos a como sale en el penúltimo episodio. Tremendo) pero, a su modo, es una controlador perfecta de la vida de Norman. Freddie Highmore está tremendo. Este muchacho se está haciendo con la serie a pasos agigantados, mostrándose débil cual pajarito (disecado o no) pero, cuando le dan esos bloqueos, resulta amenazador. No en vano, repito, estamos hablando de Norman Bates. Fíjate en la cara que tiene en la escena final cuando acaba la prueba del polígrafo. Si ese no es Bates, que venga Dios y lo vea. Max Thieriot cumple como Dylan, si bien me parece el más inexpresivo. Supongo que será lo que implica el personaje. Por otro lado, tenemos uno secundarios más que jugosos: Nestor Carbonell (Sheriff Romero) es otro a tener en cuenta. Michael O'Neill (Nick Ford) es el perfecto gángster moderno, lo mismo que Michael Eklund (Zane) Paloma Kwiatkowski está muy bien como Cody, la nuera perfecta que Norma debería tener. Es una pena que Olivia Cooke haciendo de Emma no se haya lucido un poquito más pero...




Esto ha sido todo. ¿Te la recomiendo? Sí, sin duda. Creo que es uno de los platos fuertes en lo que se refiere a series porque se sale un poquito de la norma y, por encima de todo, es una serie muy, pero que muy bien llevada y, sobre todo, entretenida. Aquí debo hacer una mención especial a una cosa que ya señalé en la reseña de la primera temporada y que me parece, además de curiosa, uno de los grandes aciertos de la serie: diez capítulos. Quizás por eso, todo está tan bien condensado y contado. En mi opinión, no le doy muchas temporadas, no por nada; es que creo que se van a centrar en lo principal y que, para más inri, todos sabemos lo que va a pasar así que, ¿por qué alargarse demasiado? Ya se sabe, ,o bueno, si breve...

Pues hala, que ya estáis tardando.

Vigilad el cielo.




miércoles, 22 de octubre de 2014

sábado, 18 de octubre de 2014

Gotham - Episodio piloto


Gotham (Gotham)
(2014)
Director: Danny Cannon.
Guión   : Bruno Heller.


Ben McKenzie.
Donal Logue.
Robin Lord Taylor.
Jada Pikett Smith.
David Mazouz.
Sean Pertwee.



 
En la ciudad de Gotham, el matrimonio Wayne es asesinado ante los ojos de su hijo, el pequeño Bruce...

¡Saludos variados a tos@s!



Hoy voy a hablaros del episodio piloto de una serie que ha creado unas expectativas más que considerables. Por eso, en lugar de esperar a ver la serie completa, me he arrancado con esta reseña. 


Y es que todo lo que lleve el nombre de Batman en su contenido es algo muy digno de tener en cuenta. ¿La razón? No solo porque es un personaje icónico que está en nuestra cultura colectiva desde hace décadas, sino porque, además, desde hace unos cuantos años para acá, estamos ante un renacimiento del mismo más que considerable desde que el colega Christopher Nolan se dedico a re-contar su leyenda desde una perspectiva en la que decir realista es quedarse muy corto.


Desde hace ya unos años, se llevaba hablando de una serie basada en el personaje que contara sus inicios en la misma línea que Smallville hizo con Superman. Por eso, el título de "Gotham" se barajó desde el principio. Pues bien, rumores, aluvión de series de súper héroes y pelis en el cine aparte, ya la tenemos aquí. Lo que os puedo decir es lo siguiente:


Una de las cosas que más me ha gustado es la ambientación. Gotham, protagonista en la sombra, resulta muy real y creo que han hecho una especie de mezcla extraña entre lo que vimos de la mano de Tim Burton (atentos a las alcantarillas soltando humo) y lo que Nolan nos ofreció en su trilogía. Las calles, los edificios, esa sensación de cutredad y suciedad por todos lados está clavada. Además, muchas de las escenas, casi todas, son de noche, mostrando un lugar casi olvidado de la mano de Dios y donde, en sus calles, puede suceder cualquier cosa. Nada de glamour ni sofisticación. Esto lo podemos ver en la escena inicial en la que (la futura) Catwoman se dedica a a robar al personal. Esa calle podría estar sacada de cualquier Bronx, lo mismo que su gente y ambiente.


La acción no se hace esperar mucho. De hecho, nada, porque los Wayne son asesinados nada más empezar. Y este va a ser el motor de todo el episodio que tenemos por delante. Según parece, uno de los ejes de la trama va a ser el hecho de que, tras el famoso atraco va a haber algo más. ¿Quién mató a los Wayne? Y, sobre todo, ¿por orden de quién? Desde el punto de la vista de la trama esto les va a venir de perlas porque, de este modo, mediante el departamento de policía, vamos a conocer a los fondos más bajos de la ciudad, toda la escoria de Gotham que, como se nos va a mostrar de manera muy acertada, está hasta los topes de mafia, delincuentes, matones y sus variados. 


Los personajes me han parecido muy bien presentados y, todos ellos,  cumplen a la perfección la función que se espera de los mismos. Gordon resulta realista, valiente y, a su modo, duro, un eco primario de lo que será en el futuro. Eso sí, verle tan jovencito, sin bigote ni gafas, me ha resultado muy raro. Bullock es el compañero que uno espera tener en una ciudad así: amargado, pasado de vueltas de todo y, como le describe Gordon, apático. Y, venga, adivina; sí, corrupto. Y es que la sombra de Falcone es alargada. Fish Mooney me da que es el típico personaje que sirve de recurso para todo y al cual se puede recurrir siempre que sea necesario; ya sea para bien o para mal; algo así como un Lionel Luthor cualquiera. El joven Bruce Wayne y Alfred, el eterno criado, no aportan sorpresas (aquí comentaré algo más tarde) Por otra parte, tenemos muchos secundarios como Montoya o Allen que, digo yo, darán su juego en el futuro investigando cosas que, a lo mejor, no deben investigarse. Y, por supuesto, todo un elenco de posibles villanos que desfilan ante nuestras narices ofreciendo más o menos novedades en cuanto al modo de concebirlos. Pero, sin duda, hay que destacar a Oswald, el futuro Pingüino. Me ha resultado muy chocante verle de joven y, desde luego, ha sido un gran acierto basar su rostro en la caracterización asquerosa del mismo que vimos en Batman Vuelve (cuya reseña, tírate el rollo, puedes leer aquí) y, además, el tipo es tan sanguinario como desagradable de ver.





Paso a los actores. Los hay que me han gustado más mientras que otros me dejan frío. El más destacable, para mí, Robin Lord Taylor, es decir, Oswald. Entre ese pelo, la nariz maquillada (se nota algo raro. ¿ordenador?), los ojos claros y los andares raros, el tipo lo clava. Curioso que se hayan centrado tanto en él y no en otro. Ah, y atentos a la escena final que tiene el tipo. Donal Logue como Bullock está muy bien; el colega borda el pasotismo del personaje y, en algunos momentos, me ha recordado a aquel personajillo que salió durante unos minutos en la peli de 1989, Eckhardt. Los más flojos, al menos para mí, son Ben McKenzie y Jada Pinkett Smith. El primero por sosainas e inexpresivo; parece que le falta que le den un empujón. La segunda, porque me resulta tan forzada y artificial como el personaje. En cuanto a David Mazouz (Bruce Wayne) y Sean Pertwee (Alfred), tampoco se puede decir mucho porque sus minutos en este capítulo se cuentan con los dedos de una mano.




¿Cosas que, por lo menos a un servidor, le han hecho ponerse un poquito a la bat-defensiva? Bueno, debo reconocer que algunas.


Para empezar, se me ha hecho un poco cansado ver de nuevo el tema del asesinato de los padres. Vale, está claro que es un hecho básico en el personaje pero, de nuevo, más de los mismo, me agota un poco. Es algo así como lo que sentí al ver el reinicio de Spiderman contando lo mismo. Creo que Batman tiene un potencial más que evidente pero, entre películas y reinicios variados puede que corran el peligro de quemar al personaje o, en el peor de los casos, chamuscar al personal que, harto de lo mismo, puede preferir centrarse en personajes menos conocidos y, por eso, más frescos. Y esto me lleva a una cosa que creo es muy importante: ¿todo se va a basar en buscar a los responsables del asesinato de los padres de Bruce o la trama se va a ir por otros derroteros más normales, es decir, capítulos con casos y argumentos más o menos independientes? En el primer caso, le doy un par de temporadas de duración; en el segundo, la cosa se pude prolongar cuanto quieran.


Hablando de personajes conocidos, esto me lleva a un aspecto que me ha llamado mucho la atención y que ya he comentado un poquito más arriba: el desfile, para mi humilde opinión, excesivo, de futuros némesis de Batman. Me ha dado la impresión de que, entre otras cosas, este piloto ha sido realizado más para los fans del personaje que para el público en general. Cualquier seguidor del cruzado de la capa (¡esto en honor a la serie de Adam West!) conocerá a, atención: Catwoman, Edward Nygma (léase Acertijo), el Pigüino o si me apuráis, posiblemente al Joker (me refiero al cómico que entretiene a Mooney. Sobre esto hay teorías a favor y en contra pero, como poco, es mosqueante) Pero, si no eres lector del cómic y te acercas a la serie en plan curiosidad, todo esto te va a traer al pairo. Además, creo que es un modo muy forzado de intentar poner los dientes largos al personal friki, algo así como un "esto es lo que os tenemos preparado; no nos dejéis de ver"


Sigo. Como ya he comentado, Gordon me parece bien presentado en cuanto a personaje pero, en lo que a su modo de actuar se refiere, tiene momentos que me dejan así, así. Para empezar, no sé si es por el actor o es que está descrito así, tiene una cara de amargado considerable, como si llevara en Gotham toda la vida y, en realidad, hace poco que ha llegado. Creo que lo podrían haber mostrado algo menos oscuro y más optimista. ¡Si la serie va bien ya habrá tiempo de amargarle, hombre! Esto, claro está, desde mi más personal opinión. 


Y, con respecto al apunte que he hecho un poco más arriba de Alfred, me ha resultado muy raro ver que el mayordomo leal y educado por excelencia, le diga a su señor Bruce, con los padres de este aún calientes después del atentado, que camine recto y no llore porque los periodistas le están haciendo fotos. Más tarde, le suelta, a voz en grito, que baje el culo de unos de los tejados de la mansión. Curioso.




Pues, de momento, esto es lo que puedo decir. No hay que olvidar que, después de todo, este es el piloto y las series suelen cambiar mucho después de un par de capítulos. Según he leído por ahí, la recepción ha sido mixta; los hay que lo defienden a capa y espada y otros a los que les ha dejado más bien fríos. Servidor se queda en un punto intermedio. Creo que este piloto tiene bastantes virtudes pero, también, varios posibles puntos flacos que pueden ser unos socavones considerables si no se lo curran bien. Además, aunque las comparaciones son odiosas, la sombra de Smallville es muy grande y alargada y está claro que Gotham tiene un tufillo a lo que vimos en la ciudad de Clark Kent más que considerable. La principal diferencia (¿Véis? de nuevo, a comparar) es que, allí donde en Smallville todo caía de un modo u otro en los hombros del futuro Superman, en Gotham han preferido centrarse en un co-protagonista, Gordon. Esto, que puede parecer pasable, para mí es de mucha importancia porque puede hacer que la serie se resquebraje de manera muy grave. Vamos a esperar y ver lo que nos trae el futuro.


Vigilad el cielo.




jueves, 16 de octubre de 2014

¿Quién es? La solución


¡Muy buenas!

Esta es la solución al enigma de ayer.

¡Gracias y saludos!



miércoles, 15 de octubre de 2014

¿Quién es?


¡Muy buenos días!

Aquí os traigo una nueva adivinanza.

Como siempre, la solución, mañana...




sábado, 11 de octubre de 2014

Trece fantasmas


Trece fantasmas (Thirteen ghosts)
(2001)
Director: Steve Beck
Guión    : Robb White, Benjamin Carr, Richard D’Ovidio
Tony Shalhoub.
Matthew Lillard.
Embeth Davidtz.
Shannon Elizabeth.
Alec Roberts.
Rah Digga.
F. Murray Abraham


Una familia hereda la misteriosa mansión de un familiar. Lo que no saben es que, en los sótanos, se oculta la maldad…

Vamos allá con otra peliculita de terror  de comienzos de la nueva década. Por aquel entonces, el género estaba en alza debido a bombazos como, por ejemplo, el sexto sentido, una película que trajo de nuevo la moda de los fantasmas al cine mezclados, de paso, con muchas situaciones tensas. Pues bien, en esta película nos vamos a dar un buen atracón de fantasmas y las situaciones peliagudas se van a dar a lo largo de todo el metraje para que el personal se arrugue a base de bien en la butaca.

Antes de nada, es necesario hacer una salvedad: aunque pille a más de uno por sorpresa, la peli no es original, sino que es un remake de 1960. Como es obvio, si bien la premisa de la que parten es más o menso la misma, la diferencia entre una y otra está clara: allí donde en la versión antigua los fantasmas se insinuaban más o menos, en esta que nos ocupa hoy se explayan en toda su gloria y esplendor, mostrándolos sin cortarse un pelo.

La película no se anda con chiquitas y nos mete en faena desde la primera escena. En esta, de manera muy acertada, no sólo se nos va a presentar la premisa de la peli sino que, también, vamos a asistir a la primera oleada de personajes protagonistas. Por ello, de manera bastante eficaz, sabemos que hay un misterioso personaje, Cyrus, que no tiene otro hobby que el de coleccionar fantasmas. Pare ello, tiene la ayuda de un vidente, Dennis. Y, ya puestos, asistimos a la cacería de un fantasma fiero, descomunal y asesino como él solo. De este modo, la peli nos mete en la acción de golpe, a base de sangre y muertes variadas y, de paso, nos deja claro uno de los platos fuertes de la misma: coleccionar trece fantasmas. ¿Para qué? Tranqui; solo los primeros minutos. Tienes toda la peli por delante para saberlo. Ahora es cuestión de que te repantingues en tu butaca o sofá y te dejes llevar. Con todo, buen punto a favor de la inmediatez de la peli.

La velocidad sigue y nos presentan al resto del elenco, es decir, a la familia Kriticos, donde todo parece idílico con mami, papi, y los niños… hasta que una desgracia en forma de incendio ocurre y mami se va al cielo. Esto lo vemos en una secuencia de títulos de crédito muy eficaz donde, mientras la cámara se mueve por la casa oímos gritos de felicidad para ser sustituidos por otros de terror. Y, sí, has leído bien: aún estamos en los títulos de crédito.

A partir de aquí, la peli no da tregua y comienza la trama que es el eje de todo el metraje y  que estamos hartos de ver de muy diversas formas en muy distintas historias, es decir, esa que cuenta que una familia hereda una casa llena de lujos que esconde un tétrico secreto. Lo malo es que la palabra tétrico puede que se quede corta en este caso. A ver, si la casa que heredas está apartada, vale. ¿Que no tiene paredes pero sí cristaleras plagadas de escritos raros? Ok. Lo malo de todo es que esos escritos son hechizos de contención en latín. Y, ¿qué contienen? Fantasmas. Porque el sótano está repleto de ellos. Doce en total, algo así como el Zodíaco Negro. Ah, y si cada habitación tiene unas gafas muy chulas, no son de adorno; es que, con ellas, ves el mundo sobrenatural. Ahí queda eso…

Como uno puede suponer, con esta premisa tan interesante y atractiva (amén de divertida, al menos, para este que escribe) lo que tenemos por delante no creo que coja por sorpresa a nadie: un buen montón de sustos variados y alguna que otra muerte (pocas, no os creáis) de la mano de los amiguitos fantasmas. Porque, si eres fantasma y de los buenos, tipo Ghost, vaya y pase. Pero, no. Los que hay aquí tienen todos una mala baba considerable. Más que nada porque a las pobres almas en pena (término más que apropiado) las han encerrado y no las dejan descansar en paz. Será por eso que tienen ese instinto asesino. Hay para de todo y para todos los gustos: el obeso que no termina de reventar; su puñetera madre que no para de cebarle; un tipo cuajado de clavos armado con un mazo; una chica en pelotas surcadita de cuchilladas que, para saciarse, tiene un cuchillo descomunal en la mano, un jovencito con un bate, un niño que se creyó Caballo Loco y tiene una flecha en la frente; un torso que se pasea sin piernas ni cabeza… hay más, claro pero mi favorito es uno al que llaman El Chacal que, de manera muy acertada en la peli, definen como “el Charles Manson de los fantasmas” Es ideal: creo que viste una camisa de fuerza hecha jirones, tiene la cabeza en una jaula, el pelo enmarañado y la cara recuerda a la niña de El exorcista en sus mejores momentos. Ah, y corre que las pela y se carga al personal a arañazos porque sus uñas son descomunales. Hay más, pero la memoria me falla. Hacemos una cosa: ve al peli y me dices cuál es tu favorito. Porque, bien mirado, aquí, los protas verdaderos, son los muertos, no los vivos.


¿Y por qué todo esto? Pues porque los pobres fantasmas sirven para activar algo llamado “el ojo del infierno” que será posible gracias a lo que persigue el chiflado de Cyrus: la máquina de Basileus, uno que vivió hace años y que estaba tan chiflado como él.

Como puedes comprobar, con toda la charla que te estoy soltando, la peli se va a columpiar de susto en susto, unos mayores y otros no tanto, para que tengas el corazoncito en un puño. Y creo que, al menos en su primer visionado, lo consigue.

Los personajes me parecen correctos. Hay unos que me caen bien y otros no tanto. Arthur me resulta algo simplón, como toda su familia pero esa es la gracia: son unas pobres personas que, desde cierto punto de vista, son unos conejillos de indias en manos de Cyrus. Este, tan malvado y retorcido, me cae mejor. Y es que los malos, no sé por qué, siempre me han molado más. Dennis es un personaje muy importante porque, sin él, la cosa sería bastante difícil de contar. Kalina, a su modo, es un buen refuerzo para todos ellos y, junto con Cyrus, es el eje de un par de sorpresitas a lo largo de la peli.

Como escenas que me gusten señalaría muchas pero tampoco quiero destriparte la peli. Los momentos iniciales en el sótano de la casita de cristal me resultan muy conseguidos porque, de verdad, son angustiosos. ¿Momentos terroríficos? Todos los de los fantasmas, en especial El Chacal o lo que le pasa al abogado al comienzo (admitámoslo, es una forma original de morir) Las escenas de la bañera de la chica del cuchillo me siguen gustando bastante y siguen resultando bastante efectivas.


Paso a los efectos. La verdad es que bastante bien pero tengo que decir que, si bien aquí los hay y la era digital ya se estaba abriendo camino, siempre me ha parecido que esta peli tiene un aire a las que se hacían a la antigua considerable, es decir, mucho maquillaje, mucha prótesis y mucha sangre artificial. El maquillaje de la chica desnuda cuchillo en mano me parece impactante, lo mismo que el de El Chacal y, en definitiva, el de todos y cada uno de los fantasmas en general. Y es que, puestos a asustar de verdad al personal, nada como los trucos de antes. Y, por supuesto, tengo que hacer referencia al modo de moverse de los monstruos, algunos de ellos resultan rápidos (el tipo de los clavos) y otros, espectrales, como si fueran a cámara rápida pero lenta a la vez. Vamos que, en cuestión de impactar, creo que lo hicieron de manera bastante notable.

Los actores me parecen correctitos ya que esta peli, admitámoslo, no es de mucha actuación. Tony Shalhoud es un padre de familia bastante creíble. Matthew Lillard  se maneja bastante bien como Dennis, aunque yo le veo y me acuerdo de él en Scooby Doo. F. Murray Abraham destila maldad en cada una de sus escenas que, no son muchas, pero están muy bien. Embeth Davidtz es una buena Kalina haciendo de salvadora de fantasmas. Shannon Elizabeth, Alec Roberts o Rah Digga como Kathy, Bobby y Maggie son los más simples pero es que la su función en la peli no da para más.

En cuanto a las cosas que puede que considere algo mejorables solo tengo que mencionar dos. La primera, no entiendo por qué Cyrus aún está manchado de sangre al final si ya ha pasado tiempo (esto lo entenderás si ves la peli pero es que no quiero destripar mucho) La segunda, que no me pega que Kathy, tan crecidita y maja, sea la hermana del retaco de Bobby. Más bien, parecería su niñera. Nada; detallitos…

Pues no más, pero tampoco menos. Debo reconocer que esta película me gusta. La primera vez que la vi me asustó bastante y estuve toda la proyección con el corazón en un puño, sobre todo, gracias a El Chacal. Luego, lo reconozco, a fuerza de verla un montón de veces, la cosa pierde su fuerza original pero eso me parece de lo más normal. Con todo, creo que merece verse y me sigue gustando como ejemplo de peli de terror actual porque, por encima de todo, entretiene durante todos y cada uno de los, más o menos, noventa minutos que dura.

Por cierto, debo destacar que la versión que yo tengo es la del Dvd que salió en la época y, cosa curiosa, viene con unos extras más que recomendables: nada menos que la voz en off de Cyrus explicándote la historia de TODOS Y CADA UNO de los trece fantasmas, de dónde vinieron, cómo murieron y por qué los escogió para su proyecto macabro. Vamos, muy acertado.

Os dejo el tráiler. No me diréis que no dan ganas de verla:






Vigilad el cielo.



jueves, 9 de octubre de 2014

¿Quién es? La solución


¡Hola!

Esta es la solución al enigma de ayer.

¡Saludos!



miércoles, 8 de octubre de 2014

¿Quién es?


¡Hola a todos!

¡Aquí os traigo un nuevo enigma!

La solución, mañana.



una publicación de Vigilando el cielo.


Gracias y un saludo.

domingo, 5 de octubre de 2014

El murciélago diabólico

El  murciélago diabólico (The devil bat)

(1940)

Director: Jean Yarbrough.
Guión   : John T. Neville, George Bricker.


Bela Lugosi.
Mary Heath.
Dave O’Brien.
Donald Kerr.


 



Un científico decide llevar a cabo su venganza usando un murciélago que él mismo ha modificado...


Hola a todos.

Hoy os traigo una peliculita de terror de los años cuarenta que tiene como estrella nada menos que a Drácula, Bela Lugosi. Se trata de una cinta de la época cuyo mayor atractivo suele ser precisamente ese: su estrella protagonista. Por delante vamos a tener sesenta y ocho minutos de misterios, venganzas y crímenes. Todo depende, claro está, de cómo se las apañaron para llenar todo ese tiempo. Muy bien…

A favor debo destacar algo que te va a sonar algo raro en este apartado de la reseña: lo cutre que es. Y es que, justo por eso, la peli resulta encantadora. La premisa no hay por donde cogerla y, bien mirada, es una chorrada como un piano que no deja de resultar retorcida: un científico se quiere vengar de sus enemigos y, para ello, entrena a un murciélago agrandado artificialmente para que mate a unas víctimas que lucen el olor de un after shave. Lo admito, escrito queda de lo más raro y, si me apuráis, hasta ridículo. Pero, lo vuelvo a repetir, es por esta razón por la que la peli tiene ese aire encantador de la época que justifica el hecho de estar hora y pico sentado en el sofá viéndola. Por eso, por lo desternillante de la trama, resulta divertida y va a hacer que veas los acontecimientos llenos de venganza y mala baba que vas a ver.  No preguntes mucho ni trates de buscar lógica a un producto que, desde su escena inicial, no tiene mucha.

Como puedes imaginarte, en un metraje tan limitado no hay tiempo para muchas cosas. Por eso, desde la primera escena, conocemos al buen doctor Carruthers mientras se las ve y las desea para agrandar con muchos rayos y electrodos a un murciélago. No cabe duda: el tipo va a ser el malo de la peli. Después, el resto de los personajes, léase los pobres pringados que van a sufrir el ataque vengativo del doctor. La trama no se va a hacer esperar; muy pronto, conoceremos sus deseos más oscuros y la razón por la que hace lo que está a punto de hacer. A partir de aquí, toca relajarse y pasarlo bien viendo cómo la mascota de Carruthers se lleva por delante a todo el que tiene la desgracia de afeitarse y usar el after shave maldito. No más, pero tampoco menos.

Los actores…  Bueno, vamos a dejar clara una cosa: esta es una peli de Bela Lugosi. Él es el eje de todo y, debo decir que, sin la inquietante presencia y buen hacer del actor, esta película estaría más profunda aún en el saco de pelis cutres de la época. Lugosi se las apaña para hacer creíble un personaje que, bien mirado, destila un tufo a científico chiflado de cómic (cutre) más que considerable. El resto del elenco, al menos para mí, deja bastante que desear en un despliegue interpretativo más que dudoso. Vale, el guión tampoco da para mucho para mucho pero, a fin de cuentas, la figura de Lugosi, aún en una historia tan rallante como esta, se hace notar. Por eso,  Mary Heath (Mary), Dave O’Brien (Johnny) o Donald Kerr (Certero) pasan por la pantalla tratando de parecer muy naturales pero, al menos para mí, o se pasan (Caso de Johnny o Certero) o no llegan (caso de Mary)



En cuanto a las cosas que no me han gustado mucho o, mejor dicho, que no me terminan de convencer, debo mencionar varias. La primera y más evidente de todas es lo cutre de la trama que, bien mirada, como dije antes, se acerca de manera bastante peligrosa al ridículo. No sé si lo plantearon así porque sí o, simplemente, fue un intento desesperado de asociar la figura de murciélago a Lugosi para atraer al personal al cine pero, mirado en su conjunto, el efecto es bastante delirante. Admitámoslo: que un after shave sea la excusa para que un murciélago ataque suena, como dije antes, cutre en extremo pero, a la vez, muy, muy curioso.





La peli cuenta con una serie de detallitos que, una vez que te metes en ella pueden o intentan pasar desapercibidos pero, si te paras a analizarla un poquito en profundidad, salen a la superficie de la manera más cantosa que te puedas imaginar. Por ejemplo, Lugosi habla en voz alta consigo mismo para hacer saber al espectador sus malvados planes. Esto le da un aire de malvado de cómic que tumba. El jefe de la policía (que, por cierto, no vale para nada ya que ni él ni los hombres del cuerpo hacen ni descubren nada) le da todo tipo de información, con todo lujo de detalles, a los primeros periodistas que llegan. El murciélago se carga a unos cuantos a lo largo de toda la peli pero los familiares y amigos de las víctimas no parecen muy afectados. Es más, es como si no lo notasen. Y, por si fuera poco, Carruthers evita tocar la loción de la muerte  (hasta se mosquea cuando uno, de broma, le tira un poco a la cara) pero bien que da la mano al que ha echado un poco de after shave en la suya primero. Nada, detallitos...


Pero si hay algo que canta con voz de tenor son los efectos. Aquí se van a centrar en una cosa: el murciélago. Sí, es un muñeco que apenas se mueve y va colgado de un cable. ¿Qué le enfocamos en primer plano? Pues se inserta la imagen de uno vivo con la cámara pegada a la cara para hacerlo parecer más grande listos.





¿Más? Sí. Los periodistas Johnny y Certero me caen mal; tratan de resultar tan naturales, duros y graciosos que el efecto se me hace justamente lo contrario. Y, para colmo, como no encuentran ningún murciélago asesino real, se lo inventan… pero se les olvida quitar la etiqueta “made in Japan” (...) A esto, hay que añadir el nulo respeto que tienen a su editor jefe, al que torean cómo y cuándo les da la gana. Y, a propósito, ¿qué tipo de médico es Carruthers? Le llaman “doctor” pero a mí me parece más un científico y, de hecho, actúa en su laboratorio como tal, No obstante, le llaman para certificar muertes.  Por cierto, no me digáis que la resolución de la peli no es rápida: aparece el murciélago, se lleva por delante al malo y fin. No explican nada, no se aclara nada. En fin, cositas que ahí quedan.




Pues esto ha sido todo. La peli no me parece una maravilla pero debo reconocer que, dentro de lo absurdo de su trama, resulta entretenida y no deja de ser una mera curiosidad. Yo, lo tengo que reconocer, la tengo porque sale Bela Lugosi y, para mí, eso ya es más que suficiente pero reconozco que es muy, pero que muy flojita que, depende de cómo te pille, puedes olvidar nada más leas el “The End” y, si eres aficionado al género, la recuerdes, sobre todo, por su actor protagonista. Sí os la recomiendo, en primer lugar, porque sale Lugosi (me repito más que un profe pesado pero es verdad) y, en segundo, porque el conjunto es tan delirante que hasta resulta simpática. Es ideal para que, un sábado por la tarde que no tengas nada que hacer, te hagas un chocolatito caliente y te arrimes a la parejita para pasar un rato curioso (viendo la peli, no pienses mal...)






Vigilad el cielo




jueves, 2 de octubre de 2014

¿Quién es? La solución.


Pues resulta que este niño es...








una publicación de Vigilando el cielo.



¡Gracias y un saludo!

miércoles, 1 de octubre de 2014

¿Quién es?


¡Hola!

Se aceptan apuestas.

La solución, mañana...


¡Gracias!