viernes, 7 de octubre de 2011

La novia del monstruo

La novia del monstruo (Bride of the monster)
(1955)
Director: Ed Wood Jr.
Guión   : Ed Wood Jr. y Alex Gordon

Bela Lugosi
Tor Jonson
Tony McCoy
Loreta King
Harvey B. Dunn
George Becwar.


El misterioso lago Marsh ya se ha cobrado la vida de doce personas. Todo el mundo cree que ahí se esconde un monstruo. El teniente Dik Craig se encargará de la caso y para ello le ayudará el profesor Vladimir Strowski. Jane, la mujer de Craig, es periodista y también investiga el caso. Lo que nadie sabe es que el siniestro doctor Vornoff es el responsable de todo el misterio, ya que está obsesionado con trabajar con energía atómica...

Debo admitirlo: como consecuencia de ver Ed Wood de Tim Burton, la conclusión que saqué fue que el verdadero Ed Wood fue el mayor chapucero de toda la historia del cine y no sé si alguien tendrá el dudoso honor de quitarle semejante título. Luego vi Plan 9 del espacio exterior y, a parte de alucinar con semejante despliegue de buen hacer cutre, pude comprobar que era cierto: Wood se ganó a pulso el apodo de "peor director de la historia" Por eso, cuando me enfrenté al visionado de La novia del monstruo supuse que me iba a encontrar otra retahíla de chapuzas como la del noveno de los planes para conquistar la Tierra y que me las tragaría a base de carcajadas. pues bien, no ha sido así... al menos, no literalmente.
                  Veamos, la película no es una maravilla del séptimo arte y la ves con cierta sonrisa en los labios. ¿Tiene ese tono cutre marca de fábrica de Wood? Sí, sin dudarlo. Pero debo admitir que aquí las cosas están un poquito más cuidadas (si es que esa palabra es la más correcta) que en «Plan 9...» La historia es delirante, con cierto aire de cómic retro con ese científico loco queriendo dominar el mundo. Los actores, dentro de su acartonamiento, cumplen lo justito, salvo por el gran Bela Lugosi, anciano y apagado, pero era Bela. ¿Qué se puede decir de Tor Jonson? Vale, en una de las escenas finales casi se cae, se apoya en el decorado y lo mueve (Ojo, en la peli de Burton esto sucede cuando abre una puerta) y su capacidad para gesticular es nula, pero esto es una película de Ed Wood y este fue lo suficientemente valiente (o apasionado) como para otorgarle a su personaje la responsabilidad de dar ese giro a la historia en su clímax final.
            ¿Hay cutradas típicas de Wood? Ni dudarlo. A parte de los problemillas del amigo Tor con el decorado hay que sumar que el pulpo es de pega y no se mueve o que el actor que sustituye a Lugosi cuando este se levanta de la camilla es otro y usa calzas tipo Frankenstein. Pero recordemos de quién estamos hablando. ¿Qué sería de una película de Ed Wood sin este tipo de cosas? Sólo por ver y oír a Bela recitar el diálogo de «Hogar... Yo no tengo hogar...» y contemplar su sonrisa final de científico demente, hay que ver esta cinta.
            A mí me ha gustado. Repito: no es la octava maravilla pero, en conjunto, se respira algo de coherencia y se deja ver. Y si lo haces, sabiendo a lo que te enfrentas, siempre con la intención de pasar un buen rato, se disfruta más aún.

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