domingo, 25 de febrero de 2024

Velma - Temporada 1





Vamos a dejar clara una cosa: esta es una serie para adultos. Sí, salen los protas de Scooby-Doo pero rodeados de crímenes, sangre, palabrotas, sexo y todo tipo de violencia que puedas imaginar. Una vez dicho esto, te digo que...

La serie es una actualización brutal de los personajes clásicos, tan brutal como drástica. Desde la escena inicial en la que vemos a Daphne (sí, es ella) en la ducha enseñando el culo sin ningún tipo de problema ya te dejan claras las intenciones.

Pero, sobre todo, pretende ser un reinicio de todo. Estamos ante una precuela en la que los personajes de Misterios S.A mantienen unas relaciones completamente distintas a lo que hemos visto hasta ahora marcadas, casi en su totalidad, por el amor-odio (sobre todo este último) Cada cual presenta una serie de características que si bien los alejan de lo que sabemos de ellos de toda la vida, los conectan de algún modo con la imagen tradicional. Así, Velma sigue siendo la detective, Daphne la presumida, Fred el pijo y Shaggy el que es más o menos razonable. Lo que ocurre es que todo ello está multiplicado de manera exponencial por la exageración descontrolada y ahí es donde vienen los ejércitos de «peros» Velma es estúpida, arrogante y pedante. Y, sí, negra y lesbiana. Daphne es una traficante de drogas cuyas madres son polis lesbianas y es adoptada. Fred tiene unos problemas psicológicos brutales por ser un niño mimado (y decir esto es quedarse muy corto) cuyos mayores complejos son no tener pelo en las piernas y un pene diminuto. Shaggy, aunque arriba lo he nombrado como tal, se llama Norville y es negro afroamericano. Esto hace que el choque generacional entre los que vimos la serie original y lo que vamos a ver aquí es tan grande que cuesta muchas veces y todo se pone difícil. Yo, al menos, la he visto del tirón al tercer intento. Creo que todo está muy exagerado para resultar provocador, bestia y rompedor, sin ningún tipo de filtro como, por ejemplo, sucede en Rick y Morty, donde las brutalidades se ven tapadas por una trama que las necesita y complementa. Aquí no, aquí cualquier escena, momento o diálogo es ideal para soltar la barbaridad de turno y eso hace que todo quede un pelín artificial. Por ejemplo, ¿por qué en la mayoría de las escenas donde hablan los personajes hay dos tíos dándose el lote en el fondo?

¿Hay misterio? Sí pero muy enterrado. Se supone que debería ser la llave de la trama pero queda oculto por las idas y venidas de las grilladas mentales, físicas y sexuales de los protagonistas. Si a los diez capítulos les quitásemos todas esas morcillas, la cosa se quedaría en la mitad. Hubiera quedado mucho mejor tener un hilo conductor y enriquecerlo con el background de los protas y sus realidades pero no, aquí han optado por un desenfreno a todos los niveles que afecta a todo como si eso fuese lo principal y aquello en lo que más se quieren lucir. ¿La sensación? Se les ha ido la mano en todo y ha hecho que me pregunte algo muy simple: Si quieres crear una serie para adultos con humor y situaciones provocadoras, ¿por qué no hacerlo con personajes nuevos? ¿Por qué tirar de lo ya conocido? Quizás sea porque, si no se tratase de quien se trata, no valdría el esfuerzo.

Pero, con todo, creo que es una temporada que hay que ver porque, por encima del montón de chorradas que muestra, la verdad es que, vista del tirón, crea un atrama que, al menos, te hace que te preguntes qué demonios va a pasar y quién es el culpable de todo. Eso sí, tómate algo con alcohol para hacer el trago más llevadero y olvídate de la nostalgia: guionistas y directores añaden puntos para que esta aparezca pero rápido la tapan con todo tipo de barbaridades.

Dicen que están en una segunda temporada. Si lees cualquier reseña o artículo hablando de esta primera, vas a ver que la ponen a caer de un burro. No sé si veré una segunda supuesta temporada pero, por mera curiosidad, te recomiendo verla.

Ah, mira el título: Velma. No busques a ningún perro porque aquí, Scooby es un proyecto militar. 

Sí, has leído bien...


2 comentarios:

  1. me pregunto mil veces, ese afán de todo volverlo negro o afroamericano, todo es gay, lesbiana,bisexual, ese afán que robar y digo bien de robar lo que ya esta hecho, pero despues se llenan la boca de igualdad y aceptación, si ellos son los menos igualitarios y tolerantes, que terrible no les da para idear a un personaje con sus ideologías que deben molestar al vecino... pero si uno les dice algo lloran, gritan por ser oprimidos... no vi la serie, perder mi tiempo entre tanta mierda, paso

    feliz lunes

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es lo más curioso de la serie: el afán de cambiar todo a lo bestia, sin ningún tipo de censura. ¿Por qué? La verdad, no lo sé. ¡Saludos!

      Eliminar