(1978)
Director: John Carpenter.
Guión : John
Carpenter, Debra Hill.
Jamie Lee Curtis
Donald Pleasence
Nick Castle
Nancy Kyes
P. J. Soles
John Michael Graham
"¡Laurie, el hombre del saco está
ahí!”
Para
celebrar el día de hoy, vamos allá con una película que viene que ni pintada y que, en muy buena parte, es la
responsable de que Halloween tenga la fama que tiene… además de, claro está,
ser uno de los hitos del llamado cine de terror postmodernista.
La
cinta, como todo el mundo sabe, fue
dirigida por todo un maestro (y artesano) del género de terror que, por
desgracia, hoy parece que Hollywood tiene olvidado pero que todo buen
aficionado gusta de recordar de vez en cuando: John Carpenter, el mismo tipo
que nos regaló en su momento La cosa, Asalto a la comisaría del distrito 13 o
1997, Rescate en nueva York. Hay más, por supuesto, como la Niebla, El príncipe
de las tinieblas o un remake que me encanta de El pueblo de los malditos. Entre
sus actores, destacamos Jamie Lee
Curtis, que se estrenó en las pantallas con esta película y con el veterano
Donald Pleasence, que aportó experiencia y reconocimiento en su papel de
doctor.
La
película, como ya apunté, es un claro referente del terror moderno. ¿Y qué es
esto? Pues el tipo de horror que desfiló por las pantallas que consistía en un
maníaco/monstruo/psicópata/Como-lo-queráis llamar que, armado con el arma que
fuera (en este caso, un cuchillo enorme) se merendaba a quien pillaba de por
medio mientras mostraba una clara predilección por el personaje protagonista
que respondía a la descripción de una chica joven, atractiva y que, de manera
que nadie puede explicar, es la única que tiene la suerte o inteligencia para
huir de él. Y, fijaos si tuvo importancia esta peli que todo el terror y monstruos
icónicos que vinieron después, se basaron en esta idea. Por eso, ahí quedan los
Jason de Viernes 13, los Freddies
que pululaban por Elm Street, o los de cara fantasmal de Scream. Pues bien, repito, esta Noche de Halloween fue quien abrió
las puertas a todos ellos.
Ok, factores a favor me han parecido unos pocos:
El
mejor momento de toda la peli, al menos para mí, ocurre en la primerísima
escena. Después de oír el nombre de Michael, asistimos a una escena inicial
rodada de manera magistral en la que, desde el punto de vista de los ojos de un
niño, asistimos a la primera gracieta, léase primer crimen de Michael Myers: se carga a su hermana que,
claro está , está medio desnuda. Y no hay razón para ello ni explicación
ninguna; el niño la mata con un buen cuchillo, como debe ser. Luego, otro buen
momento: quitan la máscara al niño y este, rubito angelical, tiene la mirada
perdidísima… y, también, el cuchillo en la mano, que no lo ha soltado. Lo
dicho: para este vigilante del cielo, el mejor momento y más impactante de toda la peli y, si me
apuráis de toda la saga.
Me gusta cómo, de manera muy rápida, lo que viene a continuación es una presentación
muy efectiva de personajes. Primero el doctor, interpretado con solvencia por
Donald Pleasence y que no deja lugar a dudas de lo que opina de Michael. Y este
es otro tanto a favor de la peli: sabemos de Michael a través de lo que otras
personas dicen de él. Por eso, los diálogos del doctor son fundamentales y muy
bien escritos, por cierto: “¿Ha visto alguna vez a un ser parecido?”, le
pregunta a una enfermera. Nótese que se refiere a Michael, claro, pero como si
fuera un bicho o un animal, no como un ser humano. “No se fíe de ese ser…” ¿Es
todo? No, porque eso se lo dice a una simple enfermera. Atentos a lo que le
cuenta al sheriff: “Ese niño tiene los ojos del diablo…” “Lo que había tras los
ojos de aquel niño era pura y simplemente, maldad” Más claro, agua.
Me
ha gustado bastante un momento muy fugaz que es el paso previo a la escapada de
Michael. Me refiero a cuando el doctor y la enfermera llegan al psiquiátrico y
los enfermos están sueltos. La escena está muy bien diseñada: es de noche,
llueve a cántaros y los enfermos, con sus camisones blancos, destacan sobre
todo el paisaje a modo de zombis sueltos. Muy bueno. Luego ocurre lo que tiene
que ocurrir y, claro está, la paga la pobre enfermera.
Otro
de los aspectos a favor es que, de nuevo en forma de diálogos de personajes
ajenos a Michael, se introduce al espectador en esa especie de sentimiento de
horror opresivo. Por eso, Tommy, el niño, se refiere a la casa de los Myers
como “Una casa encantada” Si a eso le añadimos la respiración del colega
Michael viendo y escuchando todo desde el interior a oscuras, el plan está
servido.
Aunque
haya muchos que crean que esta peli es el colmo de la sangre y las cuchilladas,
puede que al alguno le ocurra lo que a mí (en mi caso, hacía mucho que no la
veía) Y es que todo eso es más fama que otra cosa. A ver, cuchilladas hay, no
lo vamos a negar, claro. Pero también es cierto que la cinta ocupa una parte
del metraje muy, pero que muy larga en recrearse en el misterio y plantearlo.
Por eso, al son de esa musiquita inquietante de piano, aquí acudimos a muchas
escenas de coches que siguen a jovencitas, figuras que espía desde el jardín,
llamadas de teléfono, víctimas en potencia viendo pelis de terror en la tele o robos
en una tienda de una máscara de Halloween, cuerdas y cuchillos. Esto, desde cierto punto de vista, lo señalo como un buen logro pero, lo admito, en el siguiente
apartado, en el de las cosas que me han perecido mejorables, lo destaco desde
otra perspectiva.
Pero
esta es una peli de miedo, un clásico dentro del género. Y eso y hablar de
muertes es lo mismo. Pues bien, las que hay aquí me parecen bien mostradas. Quizás
la que más llame la atención sea la de Bob, ya que eso de ensartar al amigo en
la pared con un cuchillo no deja de tener mérito.
Los
actores me parecen correctos. Claro que aquí hay que hacer referencia a dos
principales. En primer lugar, como ya he mencionado, tenemos a Donald Pleasence
que, bien mirado, no es que salga mucho pero su personaje ayuda mucho a definir
a Michael. A veces parece algo listillo y mandón (maneja al sheriff como le da
la gana. yo creo que es la perilla, que resulta un poco hipnótica) pero ahí queda. Por otro lado, claro está, a Jamie Lee Curtis. Su
papel como adolescente inteligente y empollona me parece correcto. Gritando y
huyendo, también. Por eso, adquirió el título de “Reina del grito”
¿Cosas
que no me han llamado tanto?
Bueno,
tengo que decir que esperaba más tensión, más terror y más agobio. Como ya
dije, hacía un tiempo que no veía esta peli y la leyenda en la que se ha
convertido puede haber hecho el resto. La cinta, al menos para mí, tiene una
fama de cinta de culto o clásico tal que esperaba que la sangre salpicara a
montones. Pues bien, no es así y, como ya comenté se centra mucho en crear el ambiente
y el misterio. Lo que ocurre es que esto, por lo menos a mí, se me ha hecho
algo largo. Tened en cuenta que, quitando el asesinato de la enfermera, no
vuelve a haber una muerte propiamente dicha (la de Annie) hasta el minuto
cincuenta y uno. Durante todo ese tiempo, mucha charla de adolescentes, mucho
“me gusta este o aquel” y algún que otro momento cama. Esto, según te pille, te
puede gustar o no. A mí, lo digo de nuevo, no me molesta mucho pero sí se me ha
hecho un pelín largo.
Siguiendo
con las muertes, debo decir que no son
muy sangrientas o, para enfocarlo de otro modo, espectaculares. La de Bob está
bien pero el resto, aún sin estar mal, me han parecido algo flojas (la de Annie
ocurre medio estrangulada en el coche y la de Linda igual, pero con el cable de
un teléfono) Bueno, ahí quedan… Por cierto, ¿cómo es posible que el amigo
Michael tenga tanto tino con todos y, en su primer ataque a Laurie, falla con
su cuchillada? Lo que dije, la chica de turno siempre se escapa…
Y,
lo que menos me ha gustado, que no tiene
nada que ver con la peli o la historia, las medias de Lee Curtis al principio
de la peli. ¿Cosas de la época o afán de hacerla parece una chiquilla? En fin, detallito para reflexionar…
Pues
eso es todo. ¿Recomiendo verla? Sí, claro. Es un clásico a fin de cuentas y la
responsable de la oleada de películas de terror con psicópatas de turno
haciendo la vida imposible a alguien y, además, resulta muy curioso ver de dónde partió un modelo de terror que se ha convertido en un icono dentro del género Eso sí, debo reconocer que me quedo con
otras obras de Carpenter pero, para gustos, los colores.
Aquí
os dejo algunas curiosidades:
-Para
el papel de Pleasence, el doctor Loomis, fueron tentados Peter Cushing y
Christopher Lee. Ambos rechazaron porque el sueldo era escaso.
-Y
es que, dicho sea de paso, esta película es de presupuesto bajo, bajísimo: unos
325.000 dólares.
-Por
eso, no hubo dinero para ciertas cosas: el vestuario, por ejemplo.
-Por
esta razón Jamie Lee Curtis se compró su propia ropa para la peli en una tienda
normal y corriente.
-Pero
a las estrellas siempre se las distingue como tal. Por eso, Donald Pleasence
cobró 20.000 dólares. Lee Curtis 8.000. Carpenter, como director, 10.000.
-Sigo
con la pasta. El niño del comienzo cobró 25 dólares. Nick Castle, Michael con
máscara, 25 al día.
-Revancha
en taquilla: la cinta recaudó 47 millones de dólares sólo en EE.UU. En el resto
del mundo, unos ochenta. Ahí es nada.
-Se
escogió a Lee Curtis por ser hija de Janet Leight, la actriz que interpretó al
personaje que muere en la ducha de Psicosis. Alguien pensó que aquello daría
morbo y publicidad.
-En
la escena inicial, cuando vemos a través de los ojos de Michael, observamos que
su mano coge el cuchillo. Si hay algo que os resulta extraño tenéis razón, a mí
me ocurrió. Y es que las manos y brazos que vemos son los de una mujer: Debra
Hill, productora de la película.
-La
música, como es habitual, fue obra del propio Carpenter. Se basó, en parte, en
la melodía de El exorcista.
-Las
películas que los niños ven en la tele son Planeta
prohibido y El enigma de otro mundo.
-De
esta última, Carpenter rodó un remake en 1982: La cosa.
-Judith
Myers, Sandy Johnson, es la chica a la que se carga Michael al principio, fue
Playmate en junio de 1974. ¿Por eso está medio desnuda? Tampoco es que esto moleste, que conste...
-Hubo
un total de ocho Michaels. Incluso Carpenter se puso la máscara.
-Detalle
curioso: la máscara de Michael era en realidad una que representaba al capitán
Kirk de Star Trek. Increíble, pero cierto. Su precio no llegó a los dos dólares. Si uno se fija, tiene un
aire al capitán de la Enterprise.
Vigilad
el cielo.
Hola, Vania. Bienvenida a Vigilando el cielo. Muchas gracias por tus palabras de ánimo. Hablamos en privado. ¡Un saludo!
ResponderEliminar¡Hola, Israel!
ResponderEliminarHalloween me gusta mucho y esta última peli que han sacado también. Precisamente, volví a ver la original la semana pasada para refrescarme la memoria y me gustó mucho la imagen que Michael Myers transmite del hombre del saco. Es un hombre, pero al mismo tiempo hay algo sobrenatural en él. La historia es muy sencillita, pero da muy mal rollo. Nada más pensar que me puedo encontrar con un personaje así, ya me dan ganas de correr jajajaja
¡Muy buena reseña!
¡Nos leemos!
¡Hola!
EliminarYo creo que en la sencillez de la historia radica mucho del éxito de esta cinta; ahora todo tiende a complicarse mucho pero aquí todo fue tan simple (¡y barato!) que el resultado fue el inesperado.
¡Que viva Michael Myers!
Nos leemos...